Nauticaf

 28 de Mayo 2015
 Publicado en Facebook

Nosotros y los otros...

Algo raro se huele en el aire. Algo raro ocurre si yo, en lugar de escupir espinas y abrojos contra el gobierno, me tengo que dedicar a pensar en el futbol, cosa a la que me niego terminantemente.
Pero la noticia esta ahí, copa los medios, se mete en los comentarios entre amigos, arruina el postre y hace inquieta la siesta. De manera que será cuestión de buscarle la vuelta; hay que hablar del futbol pero tangencialmente... disimulando como perro que volteó la olla. Y si es posible, tratando de ser positivo, porque ya me tildan de amargado y eso es un infundio desconsiderado para con un tipo chispeante y alegre como yo.
El fenomenal despelote que se armó con la FIFA pone de relieve hasta que punto las cosas mejoran con una justicia justa. Esta tonta redundancia tiene su validez si comparamos a la morochita Loretta Lynch, Fiscal General de EE UU, la que le sacara tarjeta roja a una piara de dirigentes corruptos e intocables del fútbol internacional, con nuestra benemérita Procuradora General de la Nación, doña Alejandra Gils Carbó, que tiene por costumbre hacer de chirolita de la Jefa, embarrando la cancha cuantas veces sea necesario para que nunca se sepa nada...de nada. Ambos cargos son similares pero se ejercen de distintas maneras.
También son similares las funciones de nuestros jueces con las de aquellos jueces, con la diferencia que aquellos van hasta el fondo de la cloaca, mientras los nuestros flotan en la mierda y milagrosamente salen limpitos.
El mundo se mueve distinto a como nos movemos nosotros, los eternos amantes de la “viveza criolla”. Hay países en los que nadie duda que una investigación es honesta y va hasta el fondo, mientras que en otros, como el nuestro, uno siempre está convencido que todo va a terminar en nada.
Ahí reside la grandeza de una nación. Cuando se tiene una justicia inmune a la corrupción, que no duda en aplicar el limite de la ley a los poderosos, sin fijarse si es el momento político adecuado o si conviene o no al bolsillo.
El futbol y la justicia en nuestro país van de la mano y hasta compiten por el segundo puesto (el primero esta reservado a la jefa) en el campeonato de corruptos. Pero la justicia tiene a su favor el agregado de algunos buenos representantes de la imbecilidad, que defienden a capa y espada a quienes debieran condenar.
Quizás estos destapes en la FIFA terminen cambiando algo que parecía inconmovible y en el futuro hasta yo me anime a ver algún partido de futbol, sin pensar que está arreglado. Seria lindo.
Quizás también cunda el ejemplo y nuestra justicia panqueque se anime a hacer bien las cosas, metiendo preso de por vida aunque sea a uno de esos que todos conocemos. Seria lindo.
También seria lindo que me despierte y deje de soñar pavadas...

Héctor Fedele